Hacia las diez de la noche realizaron estación de gloria los cofrades de la hermandad del Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de María ante las puertas del templo de San Juan de Dios. Habían salido a las ocho de la tarde desde la parroquia de San Rafael, acompañados por su párroco, José López y con las agrupaciones de música del "Dulce Nombre", tras el primer paso y la A. Musical Alhendinense, con el paso del Inmaculado Corazón de María.
Rojo en el exorno floral del primer paso, con los antiguos respiraderos del Señor de la Resurrección, flanquedo en las esquinas por los candelabros de guardabrisas del paso del Cristo de la Lanzada, cedidos para la ocasión y dos grandes jarras primitivas del paso de la Virgen de la Victoria. Mandaba el primer paso Pablo Córdoba y Jesús Villarreal, con hermanas costaleras, mientras que el segundo lo hacía Pedro Sánchez, Gonzálo Gallas, Javier Beltrán y Eduardo Salamanca. Era llevado por vez primera sobre costal y en el mismo se habían realizado importantes modificaciones siguiendo diseño de Salamanca Rodríguez y ejecución de la priostía de la hermandad. Se estrenaba el canastillo del paso con orfebrería de Eleuterio Aragón y con guardabrisas cedidos por la asociación vecinal del Barranco del Abogado, de la Virgen de Lourdes.
En el cortejo figuraban representaciones de la hermandad del Cristo de la Luz, de las Carmelitas Calzadas; del Santísimo Cristo del Consuelo (Gitanos) y de la cofradía de Santa Rita.
Una vez realizada la estación de gloria en la basílica de San Juan de Dios el cortejo regresó por la calle Mano de Hierro, Arandas, Colegios y Gran Capitán hasta su sede de San Rafael, en Méndez Núñez. Tristemente cuando iba de regreso ya se habían retirado muchas de las personas que acompañaban a la hermandad en fila con cera, dado lo avanzado de la noche y el itinerario extenso de esta corporación de gloria, quedando los integrantes de las formaciones musicales prácticamente entre ambos pasos.
Rojo en el exorno floral del primer paso, con los antiguos respiraderos del Señor de la Resurrección, flanquedo en las esquinas por los candelabros de guardabrisas del paso del Cristo de la Lanzada, cedidos para la ocasión y dos grandes jarras primitivas del paso de la Virgen de la Victoria. Mandaba el primer paso Pablo Córdoba y Jesús Villarreal, con hermanas costaleras, mientras que el segundo lo hacía Pedro Sánchez, Gonzálo Gallas, Javier Beltrán y Eduardo Salamanca. Era llevado por vez primera sobre costal y en el mismo se habían realizado importantes modificaciones siguiendo diseño de Salamanca Rodríguez y ejecución de la priostía de la hermandad. Se estrenaba el canastillo del paso con orfebrería de Eleuterio Aragón y con guardabrisas cedidos por la asociación vecinal del Barranco del Abogado, de la Virgen de Lourdes.
En el cortejo figuraban representaciones de la hermandad del Cristo de la Luz, de las Carmelitas Calzadas; del Santísimo Cristo del Consuelo (Gitanos) y de la cofradía de Santa Rita.
Una vez realizada la estación de gloria en la basílica de San Juan de Dios el cortejo regresó por la calle Mano de Hierro, Arandas, Colegios y Gran Capitán hasta su sede de San Rafael, en Méndez Núñez. Tristemente cuando iba de regreso ya se habían retirado muchas de las personas que acompañaban a la hermandad en fila con cera, dado lo avanzado de la noche y el itinerario extenso de esta corporación de gloria, quedando los integrantes de las formaciones musicales prácticamente entre ambos pasos.
Texto y fotos: Granada Cofrade, Cadena Ser.
1 comentario:
Buena actuación la vuestra. Anoche os ví en la Básilica de San Juan de Dios y pasando por la calle Colegios.
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